Casa de clausura anexa a la iglesia de Sant Cristòfol
En 1599 se celebró el acto de posesión de las casas adquiridas para instalar un convento de monjas agustinas que fue fundado un año después.
La iglesia del convento, dedicada a Sant Cristòfol, era de nave única cubierta con bóveda apuntada. Fue destruida casi totalmente durante la Guerra Civil y reconstruida en las décadas centrales del siglo XX siguiendo el modelo original.
El edificio conventual, también remodelado en los años sesenta, respetando las características originales, es una edificación sencilla y austera, sin elementos decorativos relevantes.
En el zaguán del convento pueden adquirirse pastas y dulces horneados por las monjas agustinas.